Crowdfunding vs Crowdlending, ¿qué conviene más a tu negocio?
Antes de sumergirte en el mundo de la financiación alternativa debes tener claro qué método es el más recomendado para financiar tu empresa.
Pese a que el Crowfunding es la forma más conocida de financiación no por ello es siempre la más conveniente, te explicamos las diferencias que puedes encontrar entre el Crowdfunding y el Crowdlending.
El Crowdfunding es una vía de financiación basada en la recompensa o donación, es decir el dinero que recibes no constituye una obligación de contraprestación, a cambio de ese capital no debes devolver nada al donante.
¿Para qué tipo de organización es más recomendado usar el crowdfunding?
-Organizaciones sin ánimo de lucro.
-Personas con causas sociales concretas para las que necesitan financiación.
-Investigación.
-Start-ups con productos tangibles que quieren testear
-Proyectos culturales que pueden ofrecer recompensas atractivas a costes bajos (CDs, entradas de teatro, etc.).
-No quieres dar participaciones de tu empresa.
El Crowdfunding Equity sin embargo, es una inversión a cambio de una participación en el capital de la empresa, por lo que el inversor se convertirá en accionista.
¿Para qué tipo de negocios se recomienda el crowdfunding Equity?
-Start-ups dispuestas a dar un porcentaje de su empresa a cambio de capital.
-Start-ups con un plan de negocio bien estructurado y con previsiones de crecimiento.
-Si no se tiene acceso a inversores profesionales.
Por último, el Crowdlending. Este sistema de financiación alternativa funciona de forma similar a un préstamo, un inversor aporta capital con la obligación de devolverlo en una serie de pagos y con unos intereses pactados de antemano. El problema que encontramos en este último sistema de financiación es que el inversor deberá recuperar la primera cuota mensual al mes de invertir, por lo tanto la empresa debe generar ingresos de forma inmediata.
El Crowdlending es recomendado en otro tipo de negocios:
-Pymes y autónomos con solvencia y experiencia en la actividad.
-Particulares que necesiten un préstamo y tengan capacidad de devolverlo.